viernes, 2 de enero de 2015

Cómo tener preparada nuestra piel para el frío

 El cuidado de la piel no es monopolio del verano, en invierno nuestro cutis también sufre, y mucho. Para mantenerlo sano, también con bajas temperaturas, es fundamental una rutina diaria que incluya los siguientes pasos:

cuidado de la piel

1. Limpieza: un básico para mantener una piel sana es la limpieza diaria. Conviene elegir una limpiadora acorde al tipo de piel para evitar problemas cutáneos, y siempre aclarar con agua templada, sin restregar. En el caso de que la piel esté maquillada hay que limpiar dos veces el rostro para eliminar los restos de suciedad. La limpieza debe efectuarse mañana y por la noche.

2. Tónico: como su nombre indica tonifica y además equilibra el PH de la piel. Es preferible aplicarlo con las manos para no perder nada de producto y sin frotar para no irritar el rostro.  También puedes utilizar discos de algodón.

3. Hidratación: nuestra piel necesita agua, eso es así.  Para proporcionársela necesitaremos utilizar una crema hidratante adecuada a nuestro tipo de piel (seca, grasa, mixta, sensible, acné, rosácea, etc.). En el caso de tener una piel sensible siempre acudiremos a ingredientes con principios activos calmantes como pueden ser la rosa mosqueta o el aloe vera. Lo ideal es  consultar a un especialista para que haga un correcto análisis de nuestro tipo de piel.
4. Exfoliación: quizás el paso más infravalorado dentro de nuestra rutina. Se trata, no obstante, de uno de los más importantes. En invierno con las calefacciones y los cambios bruscos de temperatura las células de deshidratan y mueren más rápido. Al exfoliamos, mínimo una vez por semana, eliminamos las células muertas y los productos penetran mucho mejor en nuestra piel.
5. Protección: durante el invierno el sol sigue estando ahí arriba y los rayos UVA y UVB siguen incidiendo en nuestra piel, sobre todo si practicamos deportes al aire libre. En la montaña hay que utilizar un factor de protección elevado ya que la ausencia de contaminación y la latitud hacen que los rayos UVA sean más agresivos. Una buena crema solar debajo del maquillaje o sobre la cara lavada será nuestra mejor crema antiaging.  Respecto a la piel de los labios con un cacao natural con protección solar que evite la sequedad es suficiente.

6. Nuestras manos también necesitan protección en invierno. Una crema reparadora con alto nivel de hidratación será la mejor opción.


7. Proteger el rostro del frío: los cambios de temperatura bruscos y las condiciones metereológicas adversas dañan nuestra piel y hacen que pierda luminosidad. Para mantenerla protegida, además de cosméticos hay que resguardarla del frío con bufandas, fulares y gorros.


Si llevas a cabo estos sencillos pasos tu piel no echará de menos el verano y lucirá todo el año como si lo fuera.